Una grandiosa fiesta religiosa se vivió en el puerto de Altata y el mar fue testigo fiel de fe y devoción al Sagrado Corazón de Jesús, las tranquilas aguas reflejaron la imagen que reunió a decenas de feligreses de todas las edades quienes lo arroparon en lanchas ribereñas.

El Sagrado Corazón de Jesús es venerado por el cumplimiento de alguna necesidad, o como un acto de penitencia o de acción de gracias.

Unas de las actividades que cada vez cobra más fuerza en esta tradicional celebración religiosa es la peregrinación en el mar, que se realizó por segunda ocasión y donde los pangueros de la bahía navolatense se unen en un acto de amor y fe, para formar parte del admirable acontecimiento, que el propósito es que el Santo Patrono Espiritual bendiga las aguas para que prospere la pesca y mejore las condiciones de vida de los pobladores.

“Somos personas de fe y siempre apoyamos en las actividades que organiza la iglesia. En esta ocasión los pangueros de muelle central nos unimos para apoyar con nuestras pangas sin ningún costo. Espero que el próximo año sean más personas las que disfruten de la espectacular peregrinación en el mar en honor al Sagrado Corazón de Jesús”, expresó Jesús Alfonso Medina Gerardo, presidente de los Servicios Turísticos de la Bahía de Altata.

Después de más de media hora del recorrido por mar, entre aplausos y vivas al ritmo de la tambora la imagen del Sagrado Corazón de Jesús recorrió las cristalinas aguas de la bahía y los devotos jamás perdieron el entusiasmo a pesar de los intensos rayos del sol.

Para concluir con broche de oro el festejo católico en el templo, el sacerdote Ángel Fernando Martínez Aguilar, ofició una misa de acción de gracias. Además, los presentes disfrutaron de una kermés, donde le dieron rienda suelta al paladar con deliciosos antojitos mexicano, postres y aguas frescas.